Una persona, es endurecida (Dormida), por Dios…

Una persona, es endurecida (Dormida), por Dios….

Y por tanto, esa persona, deja de vivir, en el mundo, y vive ya, en el cielo, en breves instantes, sin ninguna enfermedad, de por medio.
Pero, después, Dios, en lugar, de hacer desaparecer, al cuerpo endurecido, de esa persona, en el mundo, deja, que, ese cuerpo endurecido, se reblandezca, y se convierta, por tanto, en un cadáver, en dicho mundo.
Pues bien, de esta manera, se han generado, todos los cadáveres humanos, que, han existido, en el mundo, a lo largo, de diez mil años.
Javier Rubio Ortín