Dios, da libertad, a las personas….

Dios, da libertad, a las personas….

….Para purificarse, o para permanecer, impuras….
Dios, no tiene, ninguna prisa….
Pero, mientras, las personas, puras, ya no sufren más, jamás, las personas, impuras, en cambio, continúan sufriendo, en el cosmos….
Y por tanto, si una persona, desea permanecer, impura, durante, mucho tiempo, pues, esa persona, se verá obligada, a sufrir, mucho, durante, ese tiempo.
Los sufrimientos, de las personas, impuras, siempre, tendrán, la utilidad, práctica, de corregir, enteramente, a todas, las averías, de las naves de Dios, es decir, las naves de Dios, solo quedarán perfectas, cuando, ya no quede, ninguna persona, impura, en toda la creación.
ES decir:
[Existen, personas impuras] = [Las naves de Dios, averiadas]
[Ya no existe, ninguna persona, impura] = [Las naves de Dios, perfectas]

Existe, un cielo, para las personas, puras, y otro cielo, transitorio, para las personas, impuras.
Existe, un cosmos, para las personas, puras, y otro cosmos, transitorio, para las personas, impuras.

Javier Rubio Ortín

Be First to Comment

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *


ocho − 6 =