El Dios, verdadero…
….Posee, millones, y millones, de naves, piramidales, para que, por medio, de ellas, todas, las familias, del mundo, se vuelvan, viajeras, libres, por el cielo, y por los universos del cosmos….
En cambio, los dioses falsos, del mundo, pues, no poseen, ninguna, de estas naves.
….El Dios, verdadero, pone, siempre, un final, definitivo, justo, a las vidas sufridas, de todas las personas….
….En cambio, los dioses falsos, pues, no finalizan, nunca, a las vidas sufridas, de las personas….
….El Dios, verdadero, es, cualquier persona, plenamente feliz, durmiendo…
….En cambio, los dioses, falsos, del mundo, pues, no tienen, nada que ver, con las felicidades, de las personas.
Javier Rubio Ortín
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