Una pirámide, casera….
Posee, siempre, una cierta, quietud-orden-felicidad, que es, directamente proporcional, a su grado, de simetría.
Simetría = Orden = Quietud = Felicidad
Y por tanto, la vida, de la persona, que posee, esa pirámide, se ve, aquietada-ordenada, por esa pirámide, en una medida, más, o menos, grande.
Javier Rubio Ortín
Be First to Comment