La Mitología griega.
Narra, de forma, muy poética, como, unos cosmonautas, inmortales (Dioses, y diosas, atlantes), en un principio, viajeros, por los universos, del cosmos, por medio, de los ovnis, con su única casa, permanente, en el cielo, o la inmortalidad de Dios, invaden, el interior tenebroso, del planeta tierra, fundan, la Atlántida, e inmediatamente después, enloquecen, casi todos, en las cuevas, del planeta tierra, olvidándose, por tanto, una parte, de ellos, de sus condiciones de cosmonautas, y quedando, sometidos, todos ellos, por tanto, a sus futuras, liberaciones-redenciones, del mal, por medio, de sus vidas sufridas.
Y por tanto, estos, dioses, y diosas, se dedican, a redimirse, del mal, mutuamente, entre sí, por medio, de unas guerras, que se organizan, entre sí (Marte, dios, de la guerra).
Como, la ciencia, de estos, dioses, y diosas, cosmonautas, considera, que, todo el cosmos, solo, está hecho, de las ideas, más, o menos, felices (Espíritus), pensadas, por las personas, nada más, toda la mitología griega, está llena, de milagros, o transmutaciones, del cosmos, realizadas, simplemente, variando, las ideas, más, o menos, felices (Espíritus), pensadas, por las personas.
Cuando, una persona, se convierte, en un dios, es decir, cuando, una persona, se convierte, en un cosmonauta, viajero, por el cosmos, esa persona, desaparece, del planeta tierra, sin dejar, rastro (Apoteosis, de esa persona).
Javier Rubio Ortín
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