La felicidad humana, y el buen juicio.

La felicidad humana, y el buen juicio.

Una persona, plenamente feliz (100 % de Carbono = Persona), es la persona, que mejor juicio, posee, de todas, es decir, es la persona, que, mejor, razona, de todas.

Y una persona, mínimamente feliz (10 % de Carbono, aproximadamente = Persona), es la persona, que peor razona, de todas, o es la persona, que, peor juicio, posee.

Si a una persona, mínimamente feliz (10 % de Carbono), que razona, muy mal, la volvemos, plenamente feliz (100 % de Carbono), esa persona, vuelve a razonar, de nuevo, perfectamente bien.

Y si a esa persona, plenamente feliz, que razona, muy bien, la volvemos, de nuevo, mínimamente feliz (10 % de Carbono), pues esa persona, vuelve a razonar, de nuevo, muy mal.

Es decir, que el grado de felicidad humana, y el buen juicio, de las personas, es algo inseparable.

Una persona, sometida a un gran miedo, o infelicidad, razona, mucho peor, que una persona, muy feliz.

Y una persona dormida, razona, mucho mejor, que una persona, despierta a la vigilia.

Y una persona, muy despierta a la vigilia, es decir, un anciano, razona, peor, que una persona, muy poco despierta a la vigilia, es decir, un niño.