Durante, toda una eternidad…
Y hasta invadir, hace, unos diez mil años, los interiores tenebrosos, de los planetas del cosmos, como, el planeta tierra….
….Todas, las personas, hemos viajado, desde, el cielo al cosmos, y desde el cosmos, al cielo, un número de veces, ilimitado, como Jesucristo, en el episodio, de su transfiguración, es decir, sin sufrir, en este tránsito, ninguna enfermedad-dolor, o muerte, de por medio, jamás.
El único contenido de este artículo: Diversas formas, de la felicidad humana.
Javier Rubio Ortín
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