El amor a los Hijos de Dios…
Es decir, el amor, a unos cosmonautas de Dios, viajeros, libres, eternos, inmortales, por el cielo, y por los universos del cosmos, por medio, de los ovnis, que, no saben, ni sabrán, jamás, lo que es, el sufrimiento, o mal (Sacerdotes, según Melquisedec).
Es decir, el amor, a los dioses, y diosas.
¡¡¡Quien, ama, a estos, Hijos de Dios, e Hijas de Dios, cumple, con la ley, de Dios!!!
Y quien, no ama, a estos, Hijos de Dios, e Hijas de Dios, no cumple, con la ley, de Dios.
Javier Rubio Ortín
Be First to Comment