El aquietamiento, de la vida, de una persona.

El aquietamiento, de la vida, de una persona.

Por medio, de cobijar, a esa persona, dentro, de la quietud, de un mineral, que se parezca, lo más posible, al mineral, más duro, que existe (Dios).
Esa persona, en estas, condiciones, tiende a conciliar, un sueño racional, plenamente feliz, y curarse, por tanto, de esa manera, todas, sus enfermedades.

Javier Rubio Ortín