La ley de Cristo, no es pesada.
¡¡¡Ni debe de oprimir, a nadie, esa ley de Cristo!!!
¿Por qué, motivo?
Pues, porque, una persona, solo se puede purificar, por completo, realmente, con la ayuda, del poder de Dios.
Es decir, ninguna persona, se puede, llegar a purificar, a sí misma, por medio, de sus propias fuerzas.
Be First to Comment