Los alimentos…
Pueden, unir, o pueden, separar, a las personas.
Cuando, los alimentos, unen, a las personas, esos alimentos, vuelven, más, felices, a esas personas, y cuando, los alimentos, separan, a las personas, esos alimentos, vuelven, menos, felices, a esas personas.
Es decir, solo son, medicinales, todos, aquellos alimentos, que sirven, para unir, a las personas, pues, todos los alimentos, que separan, a las personas, son venenos.
Ahora bien, para que, un alimento, lo pueda digerir, una persona, con éxito, es preciso, que, ese alimento, esté configurado, por un cierto porcentaje, de unión, y por otro cierto, porcentaje, de separación, que sean armoniosos, con los porcentajes, de unión, y los porcentajes, de separación, que posee, la persona, que se alimenta, con ese alimento.
Alimento = A % de unión, y B % de separación
Persona = C % de unión, y D % de separación
A % – C % =….= 0
B %- D % =….= 0
Y por todos, estos motivos, todos, los alimentos, digeribles, por las personas, pues son, escasamente, medicinales, para, esas personas.
Es decir, el mejor alimento, que existe, es el sueño-descanso, unidor, o bien, la unión, de una persona, que, no la digiere, esa persona, con su estómago.
Y con las píldoras, y las inyecciones, ocurre, lo mismo, que ocurre, con los alimentos.
Javier Rubio Ortín
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