Los infinitos errores, de la vida del mundo.
Así como la vida eterna, de los cosmonautas de Dios, viajeros, libres, por toda la creación, está hecha, de una precisión, total, sin ningún error, de por medio, en cambio, la vida, de esos mismos cosmonautas, aterrizados en el interior tenebroso, del planeta tierra, solo está hecha, de un 100 % de errores, y de un 0 % de precisión, nada más.
De manera, que, mientras, una persona, en su vida eterna, de cosmonautas, es conocida, por todas las demás personas, con una precisión, matemática, en cambio, esa misma persona, en su vida aterrizada, dentro del planeta tierra, solo tiene, una única posibilidad, que es, que el resto, de las demás personas, la conozcan, erradamente, o equivocadamente.
Ejemplo:
Jesucristo, hace dos mil años:
¿A quien, habéis visto, en la soledad, del desierto?
¿A una persona, vestida de afeminación?
No el profeta Elías, es 100 % heterosexual.
¿A una persona, que lleva, una vida placentera?
No, el profeta Elías, vive en el desierto, con el objetivo, de redimirse del mal, por medio, de su vida sufrida.
¿Una caña, sacudida por el viento?
En el desierto, habéis salido a ver, al hombre, más grande, de los nacidos de mujer, pero, cualquier niño, es más grande, que él, en la vida eterna, de los cosmonautas de Dios.
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