Nada, nos podrá separar, del amor, de Jesucristo.

Nada, nos podrá, separar, del amor, de Jesucristo.

Es decir, nada, podrá impedir, que nos dediquemos, a desaparecer, y aparecer, en el cosmos, un número de veces ilimitado, dentro, de unas vidas, inmortales.

Javier Rubio Ortín

Be First to Comment

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *


5 × uno =