Solo existe, la felicidad humana, nada más.

Solo existe, la felicidad humana, nada más.

Ya sea, en su máxima expresión, o la nada, ya sea, en cualquier expresión, inferior, a esa máxima, o el contenido.

Felicidad máxima, o  la Nada

Felicidades, inferiores a la máxima, o el contenido

Es decir, solo existe, el pensamiento humano, siempre uno, pero hecho, solamente, de una cierta felicidad humana, más, o menos, grande, nada más.

Es decir, solo existe, la sabiduría humana, siempre una, pero hecha, solamente, de una cierta felicidad humana, más, o menos, grande, nada más.

Porque, esa felicidad humana, según sea, su magnitud, adquiere, las formas de las infinitas ideas, diferentes, que pueden pensar, potencialmente, el pensamiento humano, o la sabiduría humana, en cada momento.

Y por tanto, solo existen, las infinitas ideas, más, o menos, felices, potenciales, pensadas, por el pensamiento humano, o la sabiduría humana, nada más.

Es decir, solo existen, todas, y cada una, de las ideas, más, o menos, felices, que pensamos, absolutamente, todas las personas, en cada momento, nada más, siempre, naciendo, permaneciendo, y desapareciendo, siempre irrepetibles, entre sí, o Realidad humana, que conforman, a Dios-Padre, y tal vez, el sueño eterno, del reino de los cielos, variable, en su contenido, siempre, según lo piense, o no lo piense, la sabiduría humana, y un cierto cosmos, cuyos contenidos, están variando, siempre, continuamente, es decir, un cosmos, cuyo contenido, está  existiendo, y dejando de existir, continuamente, ya lo piense, la sabiduría humana, o ya, no lo piense, la sabiduría humana.

Es decir, solo existen, el pensamiento humano, o la sabiduría humana, totalmente imaginarios, respecto, de la materia, espacio, siempre unos, pero, contemplados, potencialmente, desde, los puntos de vista, de infinitos ángulos, o ideas, más, o menos, felices.

Javier Rubio Ortín