Una persona, es fusilada….
Pero, antes, de que, esa persona, se muera, el poder protector, de Dios, duerme, a esa persona, de tal manera, que, la transmuta, en un diamante, eterno.
Y por tanto, el cuerpo, fusilado, y 100 % dormido, de esa persona, más tarde, o más temprano, desaparece, del mundo, sin dejar, rastro.
¡¡¡Y por tanto, Dios, libra-salva, a esa persona, de la muerte!!!
Javier Rubio Ortín
Be First to Comment