El sueño, y la muerte.

El sueño, y la muerte.

 

 

 

 

El sueño, de una persona, es la conversión, de esa persona, totalmente placentera, en un diamante, de dureza máxima, y simetría perfecta, invisible a los ojos humanos, y por tanto, el sueño, de una persona, es la inmortalidad potencial, de esa persona.

Y la muerte cadavérica, de una persona, en cambio, es la conversión, muy dolorosa, de esa persona, en los gases, de un cadáver.

 

El sueño, de una persona, por tanto, es, todo lo contrario, a la muerte cadavérica, de una persona.

 

Oración a Dios:

¡¡¡Que este año, entrante, 2015, millones, y millones, de personas, de todo el mundo, tengan unos sueños, de felicidad máxima!!!

 

 

 

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