La edad del diamante humano.

La edad del diamante humano.

Cuando, las personas, somos, todo lo felices, que podemos, llegar a ser, potencialmente, las personas, nos transmutamos, en un diamante, invisible, en el mundo, o las personas, nos transmutamos, en un sueño eterno, plenamente feliz, vacío, de todo contenido, sin ningún comienzo, y sin ningún final.

Pero, cuando, esas mismas personas, tendemos a poseer, una felicidad, completamente nula, nos despertamos, a la vigilia, atroz, del mundo, y por tanto, las personas, nos transmutamos, en unos diamantes, muy reblandecidos, y por tanto, en  unos diamantes, con unos grandes porcentajes, de líquidos, y de gases, y a causa, de estas blanduras, excesivas, el diamante humano, en estas circunstancias, tan adversas, se puede volver, mortal, y partirse, en dos partes (Diamante (Espíritu) + Blanduras (Cadáver)), potencialmente, si no recupera, su dureza original, cada un cierto tiempo.

Y por tanto, le basta a una persona, el ser plenamente feliz, mientras duerme, cada un cierto tiempo, para que su diamante, adquiera, su dureza original, cada un cierto tiempo, y por tanto, la edad de esa persona, se vuelva, la edad del diamante, es decir, una eternidad, sin ningún comienzo, y sin ningún final.

[Edad de una persona] = [K / {{100 % (Felicidad plena)} – {% De Carbono, que posee, esa persona (% De la felicidad plena)}}