La omnipotencia de Dios, y el mal, del planeta tierra.

La omnipotencia de Dios, y el mal, del planeta tierra.

 

 

 

Dios, es omnipotente, pero, ese mismo Dios, omnipotente, les prohibió, a todas las personas, en el libro del Génesis, el habitar, el interior tenebroso, de un planeta, como, el planeta tierra, porque, ese interior, de ese planeta tierra, supondría, para, todas esas personas, un mal infinito, inevitable.

Y por tanto, aunque, Dios, es omnipotente, su omnipotencia, no se pude dedicar, a mezclarse, confusamente, con el mal, de la vida animal, propia y exclusiva, del interior, del planeta tierra, que Él prohibió, a todas las personas.

Y por tanto, aunque, Dios, es omnipotente, ese mismo, Dios, omnipotente, se vio obligado, a repartir, en racionales individuales, redentoras, repartidas, entre todas las personas, el mal, inevitable, que, se generaron, así mismas, esas personas, por desobedecerle, y habitar, el interior tenebroso, del planeta tierra.

 

 

Be First to Comment

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *


cuatro × = 4