La principal, enemiga, de Dios.
Las muertes cadavéricas, de todas, las personas.
Es decir, el poder salvador, de Dios, no ha permitido, jamás, que, ninguna persona, se muriera, se despertara, enteramente, a la vigilia, sufriera, una agonía completa, o bien, se volviera, completamente, blanda.
En otras palabras, antes, de que alguna persona, se muriera, Dios, ha dejado, a esa persona, 100 % dormida, la ha vuelto, plenamente feliz, durmiendo, ha hecho, viajar a esa persona, al cielo, o ha endurecido, sobremanera, a esa persona.
[Persona, completamente blanda, que, no respira, y que, no le late, el corazón] = [Persona, realmente muerta]
[Persona, completamente endurecida, que, no respira, y que, no le late, el corazón] = [Persona, 100 % dormida (Dormida en el cielo), pero, completamente viva, que, más tarde, o más, temprano, desaparece, del planeta tierra, sin dejar rastro]
Javier Rubio Ortín
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