Los verdaderos, y los falsos, mártires.

Los verdaderos, y los falsos, mártires.

Los verdaderos mártires, de Jesucristo, son, todas aquellas personas, que sufren, en el mundo, lo justo, y lo necesario, para poderse liberar, del mal, para siempre, de una manera justa, e inmediatamente, después de esto, estas personas, son evacuadas, a los ovnis, carros de fuego, o nubes bíblicas, completamente vivas, y habitan, en una nueva creación, hecha, de una felicidad humana, que oscila, siempre, entre el 100 %, y el 30 %, de su plenitud.

Y un falso, mártir, de Jesucristo, es una persona, que es asesinada, por otras personas, sin más, y por tanto, sin ser liberada del mal, esa persona, y convirtiéndose, por tanto, esa persona, en un cadáver, comido, por los gusanos.

Los verdaderos, y los falsos, mártires.

Los verdaderos mártires, de Jesucristo, son, todas aquellas personas, que sufren, en el mundo, lo justo, y lo necesario, para poderse liberar, del mal, para siempre, de una manera justa, e inmediatamente, después de esto, estas personas, son evacuadas, a los ovnis, carros de fuego, o nubes bíblicas, completamente vivas, y habitan, en una nueva creación, hecha, de una felicidad humana, que oscila, siempre, entre el 100 %, y el 30 %, de su plenitud.

Y un falso, mártir, de Jesucristo, es una persona, que es asesinada, por otras personas, sin más, y por tanto, sin ser liberada del mal, esa persona, y convirtiéndose, por tanto, esa persona, en un cadáver, comido, por los gusanos.