Un diamante gigante.

Un diamante gigante.

Sería, por ejemplo, un gran cubo, de unos 15 metros, de arista, macizo, hecho, de un mineral, muy duro, de una gran simetría, o belleza, que, justo, en su centro geométrico, poseyera, un habitáculo, hueco, de unos 5 metros, de arista, también, en forma, de otro cubo, concéntrico, que es, donde se situaría, la persona, enferma, a tratar.

Javier Rubio Ortín

Be First to Comment

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *


2 − = cero