Yo soy….

Yo soy…

….Un pensamiento, más, o menos, feliz, cuyo grado, de felicidad, puede oscilar, entre, una máxima, y entre, una mínima, adoptando, por tanto, infinitas magnitudes, diferentes, de forma potencial…
Y ese pensamiento, más, o menos, feliz, que soy, a veces, piensa, a mi cuerpo físico; otras veces, en cambio, no lo piensa.
A veces piensa, al planeta tierra; otras veces, en cambio, no lo piensa.
A veces, piensa, a un cielo nocturno, y otras veces, en cambio, no lo piensa.
A veces, piensa, a un sueño, irracional, y otras veces, en cambio, no.
Pero, ese pensamiento, que soy, y gracias, a la influencia, de un ovni, puede pensar, también, potencialmente, a infinitos universos, diferentes, y a infinitos planetas, diferentes…..
De manera, que ese, pensamiento, que soy, es infinito, o ilimitado, sin ningún principio, y sin ningún final, pues, si ese pensamiento, que soy, se vuelve, plenamente feliz, se puede, hacer, una sola cosa, con el pensamiento, de Dios.
Si ese pensamiento, que soy, conoce, el sufrimiento, o mal, entonces, ese pensamiento, no es, el que es.
Pero, si ese pensamiento, que soy, se olvida, por completo, del sufrimiento, o mal, entonces, ese pensamiento, es, el que es.
¡¡¡Y cualquier persona, puede afirmar, de sí misma, lo mismo, que, afirmo, yo, de mí mismo!!!

Javier Rubio Ortín

Be First to Comment

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *


− cinco = 4