El resto de una salvación, y el resto de una muerte.
Persona = [{Hacia su salvación (Fuerza del sueño) (Hacia su conversión en un diamante)} – {Hacia su muerte (Fuerza de la vigilia) (Hacia su conversión en un cadáver)} – {Desfase, o competición establecida, entre la salvación, y la muerte} = [0]]
Y por tanto, una persona, puede finalizar, su vida, en el mundo, bien sea, por medio de su salvación, o bien sea, por medio, de su muerte.
Y por tanto, una persona, cuando, se salva, deja un resto transitorio, en el mundo, que es, completamente diferente, al resto, que deja, una persona, cuando, se muere.
Pero, ambos restos, el de la salvación, y el de la muerte, tienen, en común, entre sí, que, son inertes, es decir, que son unos restos, totalmente inanimados.
Es decir, son unos restos, que no sufren, nada, en absoluto, hágase, lo que se haga, con ellos, posteriormente.
Si es un resto, de salvación, sin duda alguna, ese resto, se volvera invisible, en el mundo, al cabo, de un cierto tiempo.
Y si es el resto, de una muerte, ese resto, permanecerá, siempre visible, en el mundo, hasta su corrupción, o agusanamiento.
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